Que cuando salen jadeando de la oscuridad
cual trote de caballos salvajes
sobresaltan al dormitar en calma de las horas
Recuerdos con voz ronca que empapan el alma
y se instalan en los poros del rostro
Recuerdos, figuras de guiones de teatro
que se mueven apoyándose
en las paredes del escenario
haciendo temblar a las entrañas
al oírlos recitar en voz baja unos versos
que no armonizan el uno con el otro
Recuerdos que fingen dormir y se nutren solos
que cuando se despiertan con lagañas en los ojos
encienden el farol de la gruta donde moran
y echan a andar zigzagueando de un lado para otro
y ríen y lloran y danzan al compás de un viejo saxófono
o simplemente se mantienen encogidos esperando
sin saber nunca el motivo de aquella danza
ni el epiteto del algo o del alguien que ellos esperan
y nunca se persona
Recuerdos con aroma a rosas silvestres, a confitura
a almendras amargas, a carantoñas
que dejan en el paladar sapidez acaramelado o acibarado
los tonos de la desolación o el alborozo en las retinas de los ojos.
Infinitas gracias entrañables amig@s por a mis humildes letras vuestro respeto y cariño
ozna-ozna