Con tono de voz reducido casi a un murmullo
el corazón decía si
Pareciendole un incomprensible, un absurdo
la razón decía no
El destino maquinista del tren de la vida
decía acaso
Mientras el alma vagabunda
que con dificultad arrastra su equipaje
no intervenía en nada
le daba igual lo que opinaran
Como podían saber lo que significaba él para ella
la esencia con la que la había impregnado
los lazos que entre ellos se habían creado
que fácilmente no se desatan
Como podían saber que el símbolo del olvido
no tiene nada que ver con la licenciatura de la memoria
Que tenían una señal para comunicarse
Que se removían para acariciarse
Que ella es la albacea de las emociones
de los sentimientos y sensaciones humanas
Y él, el Amor es el único que con su romanza
a la melancolía a su tejido sujeta
desmiembra y arranca
Infinitas gracias entrañables amig@s por a mis letras vuestro respeto y cariño
ozna-ozna